martes, 13 de enero de 2009

Clint Eastwood domina la taquilla con Gran Torino, mientras que La semilla del mal supera las previsiones


Espectacular, inesperado, sorprendente. Se pueden añadir muchos adjetivos, pero, a priori, lo más certero que se puede aplicar al éxito de Gran Torino es “sentido común”. En unos años en los que toda estrella mayor de cincuenta años está condenada al olvido, es gratificante ver como Clint Eastwood, a sus más de setenta, ha conseguido un gran recibimiento con su última película como actor principal y director. Y lo curioso es que, al contrario que la recientemente estrenada El intercambio (Changeling, 2008), que él también dirigió, Gran Torino se trata de una película más pequeña, con menos pretensiones comerciales y, aparentemente, menos sentido épico. Pero lo que son las cosas: mientras que El intercambio se quedó en unos mediocres treinta y cinco millones de dólares (con un presupuesto de cincuenta y cinco), la nueva propuesta de Eastwood ha amasado cuarenta millones tras su estreno en un amplio número de salas (previamente había sido exhibida de forma limitada, con llenos de sala absolutos). Si el boca a boca funciona, que es lo esperable, y si además se lleva algunas nominaciones en la próxima entrega de los Oscar, es muy probable que las cifras de Gran Torino en Estados Unidos asciendan más allá de los ciento veinte millones. Y eso que la película solo ha costado treinta.

Por su parte, el cine de terror ha tenido una buena entrada este año con La semilla del mal (The Unborn). La película sobre espíritus y posesiones protagonizada por la espectacular y ascendente Odette Yustman, una de las protagonistas de Monstruoso (Cloverfield, 2008), y dirigida por David Goyer, se ha hecho en su estreno con unos excelentes diecinueve millones, que son siete más de lo que apuntaban las previsiones; tampoco le va nada mal al tándem formado por David Fincher y Brad Pitt en El curioso caso de Benjamin Button (The Curious Case of Benjamin Button), que tras tres semanas en cartel ya supera los cien millones; Adam Sandler confirma ser el cómico más infalible del momento en Estados Unidos con la comedia fantástica Bedtime Stories, superando de nuevo los cien millones tras haberlo logrado recientemente con Zohan: licencia para peinar (Zohan, 2008); la que no levanta cabeza es The Spirit, que tras su mediocre estreno, con tan solo diez millones, se ha visto sepultada entre la marabunta de estrenos importantes y el mal boca a boca, quedándose con una cifra final de solo 20 millones.

1 comentario:

Hombre Lobo dijo...

Al parecer "The Unborn" (que es como la cuarta película en los últimos años que titulan en España "La semilla del mal") se ha llevado un palo general por parte de todos los que la han reseñado. Todo indica que David S. Goyer, si bien como guionista tiene lo suyo, no termina de cuajar como director. Bueno, podremos comprobarlo pronto.

Saludos!